Has estado planeando tu boda desde que tenías 10 años, desde el color de tu vestido hasta el menú de la cena. Has estado trabajando duro durante meses para hacer de este día uno inolvidable.
Pero, ¿qué acontecimientos imprevistos podrían convertir lo que debería ser el día más feliz de su vida en una pesadilla?
Horror, tu vestido es demasiado pequeño
La sopa de repollo y el ejercicio físico intensivo no han cambiado nada. El vestido que pediste en el 36 no te queda bien, te ves bien en el 38. Tus brazos están abultados, tu vientre está comprimido. No importa, estarás de pie durante toda la comida…
2. Tu prometido cambia de opinión cuando dice «sí»
Cuando tu novio te dejó 10 mensajes 15 minutos antes de la ceremonia, debiste darte cuenta de que algo andaba mal. Ahora estás pasando por el momento más humillante de tu vida. El único consejo que podemos darte es que golpees muy fuerte y que lo hagas bien.
3. Su dama de honor ha abusado ligeramente del champán
Eufórica, tu mejor amiga sigue llenando su vaso. Vino, champán, cócteles, no cuenta, por desgracia, en detrimento de su equilibrio.
Espera hasta mañana para regañarla, hoy no eres más que amor.
4. Tu peinado es un desastre
Una pausa demasiado larga, un peluquero distraído o un mal karma… sea cual sea la razón, la situación sigue siendo crítica. Las mechas de miel que esperabas se han convertido en unas feas mechas azules. Afortunadamente, el velo ocultará parte del daño…
5. Está lloviendo, está lloviendo pastora…
A mediados de julio, en el sur de Francia, la probabilidad de lluvia era casi nula. Por eso organizaste la ceremonia en un jardín. 100 invitados en una carpa para 50 personas… Es bastante convivencial, ¿no?
6. La foto no va realmente como se planeó
En preparación para el álbum de fotos, practicaste durante horas frente al espejo para sonreír con naturalidad. Desgraciadamente, no puedes controlarlo todo. Un botón no deseado, un fotógrafo miope o una caída en el momento equivocado, la vida está llena de sorpresas.
7. Los hijos de honor arruinan la ceremonia
Estás caminando por el pasillo… Pero las damas de honor están discutiendo y tu sobrino perdió los anillos jugando al fútbol con el cojín. Entrenar a tu gato para que lleve el tren habría sido más fácil.
8. A pesar de las clases de baile, el novio no tiene ritmo
Entre el ataque epiléptico y el exorcismo… En una pista de baile, así es como definirías el estilo de tu prometido.
A pesar de los ensayos frente a Dirty Dancing y muchas clases particulares, es imposible hacerle progresar, es un patoso.
9. En el momento del brindis, su testigo revela (demasiado) mucho
Ya sea tu amigo de la infancia o tu tío que te vio en un pañal, el testigo está obligado a conocer historias embarazosas sobre ti. La mala suerte, llevada por la emoción, revela mucho más de lo que debería.
10. Puede que nunca os hayáis conocido… Lo principal es que os queráis
Cabello azul, novias borrachas y discursos fallidos son detalles. Recuerdos divertidos que te harán divagar con emoción cuando seas viejo y sigas enamorado. ¡Están juntos de por vida y eso es lo que cuenta!